Arropándote
Siente mis labios sobre los tuyos en un ligero roce, no más.
Cierra los ojos esperando el abrazo de la sábana sobre tu rostro
y cuando la sientas deslizarse hacia abajo, abrazando la manta,
entonces subiré ambas hasta que tapen tu cuello
para que no se enfríe en la noche.
Y así podrás dormir y soñar feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario